En el proscenio del teatro y el presente

Víctor Manuel Reyes Flores

Entender el Teatro como un suceso natural para los hombres, que sucede en el presente y nos transporta a pasajes cotidianos de nuestra propia existencia, fue la manera como el actor, director y escritor Alfonso Cárcamo abordó este arte con la comunidad universitaria de la FES Cuautitlán, una hilarante, cautivadora y reflexiva plática que fue organizada por Cultura UNAM.

Para mostrarlo, el invitado hizo que los asistentes del Aula Magna de Campo Uno experimentaran un “ejercicio esencial del teatro” a partir del recuerdo de dos momentos de su pasado, uno triste y otro dichoso, con los que pudieron saber olores, emociones, personalidades, entre otros. «Pudiste volver a saborear ese espacio que no está aquí…Eras, sucedías, ocurrías».

Así, Cárcamo señaló que el Teatro es la representación constante, prospectiva y retrospectiva, un vaivén del aquí y ahora para contar historias “que no son las actuales”, pero que manifiestan presentes que nos significan a nosotros mismos.

Lo anterior, por consiguiente, lo llevó a sumergirse en las palabras de Rosario, un personaje común pero consciente de su orden cósmico en la mente del autor, y a profundizar en la llamada línea de proscenio, la distancia entre un artista y el espectador, quienes están relacionados en un mutuo acuerdo de correspondencia.