Obras que benefician en grande a la comunidad 

Con el fin de mejorar sustancialmente la vida universitaria dentro de la Facultad, la administración actual ha tomado la iniciativa de realizar diversas obras, aprovechando las áreas existentes y las que se desarrollarán en el futuro. Las modificaciones a los distintos espacios buscan favorecer las actividades académicas, estimular el encuentro libre y espontáneo, y embellecer el panorama.

La celebración del 50 aniversario de la Facultad fue la oportunidad ideal para inaugurar algunas de estas obras, como el Reloj Monumental del Campo Cuatro, el cual se colocó en la glorieta de la Unidad de Investigación Multidisciplinaria (UIM). Para este proyecto, se acordó la reubicación de la pieza “Escalera al cielo”, la cual forma parte de una colección construida por el artista Margarito Leyva Reyes.

El espacio designado para la pieza metálica se ubicó frente al Auditorio de Extensión Universitaria, ya que este lugar además será aprovechado para integrar una zona lúdica, rodeada por muros adornados con cuadros, sardineles, jardineras y las cuatro bancas que fueron donadas por la primera generación de egresados de la carrera de Medicina Veterinaria y Zootecnia (MVZ).

Esta área estará habilitada para finales de enero y será accesible para todos, ofreciendo a la comunidad un diseño acogedor y un tamaño que no interfiere con el libre desplazamiento ya que el objetivo es ofrecer a los universitarios una zona de descanso al aire libre.

Otra de las acciones para ayudar a crear un ambiente más adecuado para el aprendizaje fue el barnizado de la duela de madera en las Salas Uno y Dos de los Silos Culturales, puesto que contar con un piso adecuado para las clases de los Talleres de Danza y Teatro es un factor esencial para reducir el riesgo de lesiones de los bailarines y actores. 

De acuerdo con la ingeniera Diana Cortes Mondragón, superintendente de Obras y Conservación de la Facultad, el mantenimiento correctivo es primordial para la durabilidad de los pisos y para salvaguardar la integridad de los aproximadamente 237 universitarios inscritos anualmente en estos talleres. Por eso dentro de sus funciones, se encarga de hacer recorridos para detectar las necesidades más apremiantes dentro de las instalaciones, asimismo, atiende las solicitudes de los usuarios para darles seguimiento y solución.

María Dolores Elizondo Alvarado 

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