Durante este periodo de aislamiento derivado de la pandemia por el SARS-Cov-2, algunas personas han presentado signos de ansiedad, miedo, estrés agudo, depresión y comportamientos compulsivos, entre otros. A consecuencia de esto y con la finalidad de orientar a la comunidad sobre el manejo de las emociones, se llevó a cabo la charla Salud mental en la pandemia.
Esta plática fue organizada por el Departamento de Difusión Cultural de la FES Cuautitlán y presidida por la doctora Claudia Azcué Sánchez, subdirectora médica en la clínica número 57 del IMSS. La especialista inició el diálogo proporcionando algunos datos sobre la transmisión de la enfermedad COVID-19, señalando que en promedio los síntomas se desarrollan entre los tres y catorce días. Además, indicó que el portador deja de contagiar el virus después de tres semanas de haberse infectado.
La presentadora explicó que se están considerando como casos sospechosos a aquellas personas que presenten por lo menos uno de los siguientes síntomas: tos, fiebre, dolor de cabeza y dificultad para respirar; acompañados de otros como dolor muscular, de articulaciones, malestar en la garganta al deglutir, temblor generalizado, dolor torácico, escurrimiento nasal, pérdida del olfato, conjuntivitis y sabor metálico en la boca.
Por lo anterior, la doctora exhortó a la comunidad a seguir manteniendo las medidas sanitarias, pues subrayó que nadie es invulnerable, sobre todo en esta nueva normalidad en la que cada vez más sitios están siendo concurridos. Por otra parte, apuntó que no sólo se debe cuidar la salud física sino también la emocional, ya que durante este periodo los índices de depresión han aumentado.
Para ahondar en el tema, la especialista manifestó que es importante reconocer y aceptar nuestro estado anímico, pues tomarnos el tiempo para liberar pensamientos negativos, relajarnos y enfocarnos en el presente es primordial. Agregó que es fundamental mantener una escucha activa, empática y comprensiva con las personas que nos rodean, así como visualizar el panorama completo, tomando en cuenta que los investigadores continúan trabajando para hallar la cura y que hay personas que se recuperaron con éxito de esta enfermedad.
La doctora Azcué recalcó que la mejor medida para evitar el contagio es permanecer en casa, por lo que dio algunas recomendaciones para mantener una vida lo más equilibrada posible a nivel físico y mental: establecer rutinas, mantenerse comunicados, hidratarse, descansar, llevar una alimentación balanceada, exponerse al sol para activar mecanismos dentro del organismo, realizar actividades deportivas o recreativas y usar vestimenta casual de forma cotidiana.
Además, mencionó algunas instancias a las que se puede recurrir en caso de necesitar ayuda psicológica o presentar síntomas por COVID-19, tales como la Comisión Nacional contra las Adicciones (CONADIC), los Centros de Integración Juvenil, la Unidad de Inteligencia Epidemiológica Sanitaria (UIES), el Centro Integral de Salud Mental “San Jerónimo”, la Federación Nacional de Colegios, Sociedades y Asociaciones de Psicólogos de México y la Línea de Atención Psicológica Call Center UNAM, entre otros.
Liliana Alvarado Sánchez