2 de octubre no se olvida, reclama Taller de Teatro

“El 2 de octubre no se olvida y nosotros, como gente de teatro, asumimos la responsabilidad de recordarles y recordarnos que estos cambios que se suscitaron en el país y en el mundo siempre estarán presentes”. Con estas palabras la maestra Magdalena Santana Copca, responsable de Enseñanza Artística, dio inicio a la puesta en escena virtual “Las Tres Culturas, un lugar de encuentro”, para conmemorar de la matanza de 1968.

El grupo representativo de Teatro “Antonio González Caballero realizó un video y antes de presentarlo narraron aquéllo que los inspiró para esta creación. En primer lugar, Hugo Gómez aseguró que la intención de este trabajo fue reflexionar si realmente se cumplieron los objetivos de este movimiento. “Buscaron generar mayores libertades en el ámbito político y civil. Hoy podemos criticar al gobierno, sin temor a que tomen represalias en nuestra contra”, explicó.

Por su parte, Hazel Terán dijo que cuando supo de este acontecimiento se encontraba cursando la preparatoria, “ellos eran estudiantes como yo”, expresó. Después, Virginia Parra mencionó que todos los movimientos sociales dan pie a la realización artística, “el teatro es la oportunidad de que estos eventos no mueran”, afirmó.

De igual manera, Luz Serrano señaló que el 2 de octubre es un referente histórico de represión y, sobre todo, de manifestación. Luego, Bryan Pineda reflexionó sobre qué tanto se sabe y la falta de información en torno al tema. En la última participación, Jimena González expresó que, a 53 años de este hecho, lo importante es seguir en búsqueda de la verdad y no quedarse con las versiones oficiales.

Posteriormente, el video comenzó con la consigna “el 2 de octubre no se olvida”, dando paso a las voces de algunos universitarios encargados de narrar lo que aconteció ese día, explicaron que fue un movimiento estudiantil que luchó por erradicar injusticias; sin embargo, todo acabó con acciones de represión y una terrible matanza en la Plaza de las Tres Culturas, Tlatelolco, ordenada por el entonces presidente Gustavo Díaz Ordaz

Posteriormente, una estudiante de Ingeniería Mecánica de Ciudad Universitaria apareció para decir “es mi educación y el camino para acabar con la injusticia. Gritemos y alcemos la voz por los que ya no pueden y por todos aquéllos a quienes les robaron sus sueños”.

En su oportunidad, el profesor Alejandro Serrano Morales expuso que gracias a este movimiento se lograron diversos cambios: se reformaron y crearon leyes educativas y se fundaron universidades como la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM). La UNAM amplió sus servicios y construyó nuevas unidades académicas fuera de Ciudad Universitaria. “Puedo decir que gran parte de la educación que conocemos en la actualidad es gracias al movimiento del 68”, admitió.

Antes de terminar, acordes de guitarra a ritmo de trova acompañaron el testimonio sobre lo que un habitante de esa unidad habitacional vivió ese trágico día. Finalmente, la pantalla se cerró con voces femeninas declamando “recuerdo, recordemos, hasta que la justicia se sienta entre nosotros”, el “Memorial de Tlatelolco”, poema escrito por Rosario Castellanos.

Martha Guadalupe Díaz López