Otorgan Medallas Gabino Barreda y reconocen a alumnos de excelencia académica

Eduardo Alberto Puga es parte de un grupo de 10 egresados que fueron galardonados con la Medalla Gabino Barreda, entregada cada año a quienes obtuvieron el promedio más alto al término de sus estudios. Por otro lado, Lizbeth Rivera Olivares y 25 graduados fueron distinguidos como alumnos de excelencia académica en una ceremonia celebrada en la Unidad de Seminarios “Dr. Jaime Keller Torres”, en presencia de autoridades, docentes, amigos y familiares. 

La ingeniera Laura Margarita Cortázar, secretaria de Evaluación y Desarrollo de Estudios Profesionales, fue la primera en dirigirse a los ex alumnos para conminarlos a poner en alto el nombre de su carrera y alma mater. Por su parte, el doctor David Quintanar Guerrero, director de la FES Cuautitlán, reconoció que obtener una de estas condecoraciones no es sencillo ni convencional, pues requiere de un gran esfuerzo, usualmente sustentado en el núcleo familiar. 

El significado de la medalla, prosiguió, es singular porque en una de las caras observamos el retrato de Gabino Barreda, un personaje excepcional, ya que, entre otras acciones, introdujo el método científico a las Preparatorias Nacionales. A contracara, explicó, tiene un ave bicéfala formada por la unión del águila mexicana y el cóndor andino, acompañado por el lema universitario “Por mi raza hablará el espíritu”, para resguardar la vocación humanística con la que fue concebida la Universidad Nacional, expresó.  

“Es significativo obtener esta medalla  y el reconocimiento de excelencia, pero es más importante conservarlos siempre anteponiendo la integridad. A todos los galardonados quiero exhortarlos a ser  dignos del galardón y de su Máxima Casa de Estudios, no la olviden”, enfatizó.

Después, tomó la palabra el ingeniero Eduardo Puga, en representación de los condecorados con la Medalla Gabino Barreda, quien primero agradeció a todos los que formaron parte de este logro. Luego, subrayó la labor de sus profesores y de la institución, que lo impulsaron a seguir adelante. “Todos somos un proceso”, aludió, “cada uno sabe lo que tuvo que hacer y no para estar aquí. Tener esta medalla no nos define como personas, pero sí lo que hicimos para obtenerla”, concluyó. 

Siguió la ingeniera Lizbeth Rivera, quien representó a los alumnos de excelencia. Recordó que hace dos años lo que parecía un descanso de la rutina se convirtió en una lección de vida que les sirvió “para aprender a valorar las cosas sencillas e insignificantes que a veces damos por sentado”. De igual forma, agradeció a sus profesores el apoyo incondicional, “sus enseñanzas las llevo en mi corazón. Recuerden que la educación no cambia el mundo, cambia a las personas que van a cambiar el mundo”, exclamó. 

En el evento también estuvieron presentes el ingeniero Alfredo Alvarez Cárdenas, secretario General, el maestro Luis Rubén Martínez Ortega, secretario de Atención a la Comunidad (SAC), y la doctora María Guadalupe Calderón Martínez, jefa de la Unidad de Administración Escolar (UAE). 

María Dolores Elizondo Alvarado

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