Instruyen sobre acciones en pro de la erradicación de la violencia de género en la UNAM

Con el propósito de promover acciones que fomenten una auténtica cultura de equidad, la Defensoría de los Derechos Universitarios, Igualdad y Atención de la Violencia de Género (DDUIAVG) y el Departamento de Diseño y Comunicación Visual (DCV) de la FES Cuautitlán convocaron a la “Plática sobre violencia de género y la ruta de atención a casos de violencia de género”. 

La actividad se abordó desde dos perspectivas, la primera dirigida a académicos y funcionarios y la segunda enfocada a estudiantes. Estas charlas contaron con la participación de la maestra Lizeth Capulín Arellano, especialista en clínica psicoanalítica, y las licenciadas Gabriela Martínez Pérez, María Rodríguez Dionicio y Nydia Cervera Finol, prestadoras de servicios en la Unidad de Atención de Denuncias (UNAD), y coordinadora jurídica del Centro Psicoterapéutico Contra la Violencia (CEPCOVI), respectivamente. 

En el principio, establecieron diferencias entre los términos sexo (características biológicas y fisiológicas que definen al hombre y a la mujer) y género (refiere a los atributos sociales que se le otorgan a cada uno). También, determinaron la disimilitud entre la agresividad, que es el sentimiento que experimentamos todos y nos sirve para protegernos, y la violencia, que es un aspecto cultural que busca el sometimiento y el control. 

Al hablar sobre violencia de género, las especialistas explicaron que se ejerce como una forma de discriminación que perpetua los estereotipos y que existen diversos tipos, como la física, psicológica, patrimonial, económica, sexual y obstétrica. Por otro lado, estas modalidades se clasifican en familiar, institucional, laboral y docente, en la comunidad, digital y mediática.   

Después, el diálogo se centró en el papel de la DDUIAVG en la ruta de atención de los casos de violencia de género entre la comunidad universitaria. El procedimiento inicia acercándose para pedir orientación a la Defensoría a través de redes sociales, llamadas telefónicas y en el área de trabajo social. Este organismo deberá regirse bajo los principios de independencia, buena fe, imparcialidad, legalidad, debida diligencia, confidencialidad, eficiencia y bajo perspectiva de género.

Posteriormente, se realizará la contención y canalización por parte del área psicológica. Se efectuará la queja y se le dará seguimiento, estableciendo comunicación con la entidad y la persona afectada. Por su parte, la licenciada Martínez declaró que los objetivos de ofrecer atención oportuna son reducir el nivel de estrés por el impacto, identificar las redes de apoyo, robustecer las estrategias de afrontamiento, fomentar la autonomía y la toma de decisiones, así como resignificar los hechos. 

En las charlas también se habló sobre los diferentes tipos de procedimientos a los que se puede recurrir, pues existen de tipo disciplinario,  investigación administrativa y los alternativos, resoluciones que buscan brindar justicia restaurativa priorizando la significación del impacto, las secuelas y la afectación que se realizó a la víctima.

María Dolores Elizondo Alvarado

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