Valentía, equidad y empoderamiento del género femenino en eventos deportivos

Liliana Alvarado Sánchez

 

 Para celebrar la lucha que las mujeres han realizado para lograr un trato digno y el respeto de sus derechos humanos, el Departamento de Actividades Deportivas y Recreativas organizó dos actividades para conmemorar el Día Internacional de la Mujer: el Curso-taller de defensa personal  “Ni una más” y una sesión de temazcal, las cuales contaron con una importante presencia de la comunidad universitaria.

En la primera de éstas, Noé García Mejía y Eréndira Hernández Rojas, profesora de Full contact y Lima Lama en la Facultad, brindaron a las asistentes algunos consejos de cómo actuar ante una situación de peligro, entre los que mencionaron “hacer público el acto para llamar la atención e intimidar al agresor”.

Durante la clase que tuvo lugar en el Gimnasio de Campo Cuatro, continuamente se explicaron y  practicaron técnicas de defensa personal con el objetivo de mejorar las habilidades de los asistentes. “Esto podría salvar su vida en caso de ser agredidas”, recalcó el instructor García.

Además, se buscó que las participantes se situarán en un escenario real; para ello, se empleó un lenguaje agresivo en el que se escucharon, de manera intencionada, comentarios machistas a fin de elevar sus emociones y enseñarlas a controlarlas.

El temazcal comenzó cuando se encendió una fogata en la que se reunieron los presentes para agradecer a la naturaleza. Entonces, José Alfaro Cruz, representante de danza contemporánea, pidió permiso a cada rumbo y punto cardinal, al cielo y a la tierra y al rincón más importante, el corazón.

Después de ser sahumados con incienso de copal para ingresar al temazcal, el vientre de la madre Tierra, los participantes expresaron aquello que los aqueja, hicieron una introspección y finalmente verbalizaron su experiencia. El ritual terminó cuando se les vertió agua fría en el cuerpo para cerrar los poros e ingirieron alguna fruta.

En entrevista, el maestro Norberto Flores Porcayo, instructor de Taekwondo y uno de los organizadores, comentó que la sesión fue realizada para “dejar todo lo malo y renacer, salir con mejores pensamientos y mejores actitudes”. Asimismo, explicó que para poder celebrarla es necesario reunir un mínimo de diez personas y solicitarla en caja o con los encargados: él, José y Horacio Peralta Márquez, coach de fútbol americano. El ritual dura dos horas mínimo y es necesario llevar ropa ligera y cómoda.

A pesar de que ambas actividades estuvieron dirigidas a la comunidad femenina de la Facultad, los hombres también participaron activamente en ésta para conocer más acerca de una lucha constante por la igualdad, una vida sin violencia y el pleno desarrollo del género en la sociedad.

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