José De Lucas, un referente de la ovinocultura en México

«La muerte no nos roba los seres amados. Al contrario, nos los guarda y los inmortaliza en el recuerdo”. 

François Mauriac

Recientemente, la FES Cuautitlán sufrió la pérdida de uno de sus más destacados académicos, el doctor José De Lucas Tron, un referente de la ovinocultura en el país. Para rendirle un homenaje póstumo se llevaron a cabo de manera híbrida dos mesas redondas.

Al inicio de la primera mesa, el doctor David Quintanar Guerrero, director de la Facultad, presentó la semblanza del homenajeado. José De Lucas nació en Naucalpan, Estado de México, un 29 de marzo de 1951. Estudió MVZ en la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UNAM. Ingresó a la entonces ENEP Cuautitlán en 1975 como ayudante de profesor. En ese mismo año, se convierte profesor titular de Zootecnia Ovina, la cátedra que impartió durante toda su trayectoria académica. 

Dentro de esta multidisciplinaria también fungió como Consejero Técnico y, en su momento, planteó la base del actual plan de estudios de la licenciatura de MVZ. Además, es considerado precursor en el ámbito académico de la producción de pequeños rumiantes dentro de la UNAM,  la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) y la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM).  

Como parte de este recuento, el maestro Jorge Alfredo Cuellar Ordaz rememoró algunas experiencias que compartieron durante la fundación de la Asociación Mexicana de Técnicas Especialistas en Ovinocultura A.C (AMTEO), de la cual fue presidente e impulsor en lo periodos 2002 y 2006. 

Por otra parte, el doctor Quintanar expresó que siempre creyó que el homenajeado era charrúa; sin embargo, sólo tenía estrechos lazos con este país sudamericano por su familia política y algunos colegas. Uno de ellos, el doctor Jorge Tórtora Pérez, quien durante su participación definió al académico como “el mexicano más uruguayo”, pues mencionó que gracias al mate comenzó su amistad. Por otra parte,  destacó su gran compromiso con la docencia “abrazaba a sus alumnos y los proyectaba”.

En el ámbito profesional, el doctor De Lucas colaboró con especialistas de otras latitudes, quienes también se unieron al homenaje por Zoom. Desde Colombia, el doctor Genaro Miranda de la Lama, agradeció  todo lo que el doctor José De Lucas Tron les dio “fuimos sus alumnos no sólo en la licenciatura, sino también en la vida. Todos tenemos un libro de su autoría sobre la ovinocultura”, aseveró.

El doctor Gerardo Caja López, en directo desde Barcelona, narró una de las historias literarias que más disfrutó el homenajeado, el viaje de Jasón y los argonautas, en la novela de Robert Graves “El vellocino de oro”, que cuenta el origen de la lana blanca y fina, que en aquella época era tan importante como el oro.

Adicionalmente, la doctora Rosario Jiménez Badillo, contó que el investigador la impulsó a seguir con sus sueños y la aconsejó a siempre a buscar el lado positivo de las cosas. En su oportunidad, el doctor Juan Pablo Martínez Labat habló de una afición que los unió, la carpintería.

Alegre, leal, persistente, necio, discutidor, sencillo, culto y un caballero fueron algunas de las palabras que usaron los ponentes para describir a “Pepe” como lo llamaban afectuosamente sus amigos.  Al final, todos los asistentes coincidieron en que “Pepe se fue, pero se queda, así pasa con los grandes hombres, los grandes amigos, es una separación momentánea”.

Martha Guadalupe Díaz López

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