Estudian genes asociados a la Enfermedad Inflamatoria Intestinal

En la actualidad, los avances en estudios científicos han beneficiado a la población de distinta manera, sea en la generación de nuevos conocimientos o en la forma de combatir las enfermedades, lo cual se debe al progreso y trabajo multidisciplinario de otras áreas del conocimiento humano que, en su conjunto, contribuyen en bien del ser humano y de su entorno.Con el reto de impactar en la salud pública y mejorar las condiciones de vida de los enfermos, el doctor Salvador Fonseca Coronado, investigador de la FES Cuautitlán responsable del Laboratorio 17 “Inmunobiología de enfermedades infecciosas” de la UIM, en colaboración con la QFB Sarai Quiroz Cruz, desarrolla la investigación “Asociación de variantes genotípicas en los genes NOD2, IL10 y ATG16L1 con el riesgo de padecer Colitis Ulcerativa y Enfermedad de Crohn”, que busca transformar la manera de enfrentar esta afección.

Antecedentes: el proyecto de la Hepatitis C

El proyecto surge en colaboración con dos centros de atención médica el ISSSTE y el IMSS, el Hospital Adolfo López Mateos y el Hospital de Especialidades del Centro Médico Nacional “La Raza”, respectivamente, colaboración que tiene su origen en la participación de los investigadores con un proyecto relacionado con la Hepatitis C, cuyo objetivo era asociar dos polimorfismos de nucleótido único (SNP) con el éxito del tratamiento farmacológico de la enfermedad.

El estudio de estos polimorfismos permite saber la probabilidad de que un paciente responda favorablemente al tratamiento antiviral, y en caso contrario, sugerir otras alternativas para evitar los efectos adversos del tratamiento: citopenias (disminución en la generación de células en la sangre) con inmunosupresión y diversos trastornos a nivel del sistema nervioso central entre los que se incluyen fuertes depresiones.

El éxito del trabajo fue tal que los médicos responsables de los casos clínicos extendieron la colaboración con el grupo de investigadores de la Facultad, ahora para investigar la enfermedad inflamatoria intestinal y su asociación con diversos polimorfismos.

EII: causas y sintomatología

La Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII) representa un problema de Salud Pública en México, ya que tiende a ser un padecimiento prolongado que se agudiza con el paso del tiempo y que afecta la salud del individuo y sus relaciones sociales. Son dos las principales enfermedades, la Colitis Ulcerativa (CU) y la Enfermedad de Crohn (EC).

La incidencia a nivel mundial de la CU oscila entre el 0.5 y 24.5 /100,000 habitantes, mientras que para la EC está entre el 0.1 y 11/100,000 habitantes. Sin embargo, existen pocos estudios sobre su incidencia en México, aunque se ha reportado un aumento en el número de casos diagnosticados.

Clínicamente, la EII es un padecimiento que «se caracteriza por la presencia de inflamación crónica en el tracto gastrointestinal debido a diversos factores, entre los que se destaca una desregulación de la respuesta inmune en individuos genéticamente susceptibles”, destacó el doctor Fonseca.

Si bien estas enfermedades aún no se comprenden en su totalidad, se han descrito factores genéticos e inmunológicos que contribuyen a su desarrollo. En este sentido, el sistema inmune intestinal mantiene contacto tanto con agentes externos como con la microbiota (microorganismos que se encuentran naturalmente en el intestino), por lo que debe distinguir entre agentes inofensivos y patógenos para mantener la homeostasis intestinal. Esta interacción está relacionada con una inadecuada respuesta inmunológica, que condiciona la aparición de síntomas relacionados a la EII.

_dsc0020

“Una de las características de la enfermedad es que se puede perder la tolerancia inmunológica ante la microbiota, por lo que se trata a estos microorganismos como agentes extraños. El resultado de este proceso es la inflamación”, mencionó el doctor Fonseca. La labor de los investigadores es identificar  alteraciones en los genes del sistema inmune asociados con el desarrollo de la EII y el nivel de gravedad de la misma, lo que permitiría a médico y paciente planear mejores esquemas de tratamiento y control.

Los resultados de la investigación: el análisis asociativo de la EII

El trabajo de los investigadores de la FES Cuautitlán se concentra en la asociación que puedan tener los tres genes estudiados, NOD2, IL-10 y ATG16L1, en la aparición de la enfermedad y su evolución, de modo que los procedimientos se llevan a cabo en pacientes diagnosticados y con aquéllos con los que el diagnóstico es confuso.

“Estos estudios son retrospectivos y prospectivos. En un grupo de pacientes, de los que sabemos tienen la enfermedad, se buscan las asociaciones correspondientes para determinar frecuencias genotípicas y alélicas; en pacientes recién diagnosticados permite establecer su asociación con protección o susceptibilidad al desarrollo de EII», refirió el doctor Fonseca.

Con dicho propósito se extrae una muestra sanguínea de los pacientes (previa firma del consentimiento informado) para posteriormente analizar su DNA a través de la técnica de Genotipificación por sondas Taqman en un equipo de PCR en tiempo real; así, se obtienen los gráficos de asociaciones para estos polimorfismos.

Hasta ahora se han encontrado asociaciones en el gen IL-10 en dos polimorfismos tanto a nivel genotípico como alélico. En el primero de los casos (rs1800896) se identificó que los pacientes no diagnosticados, con un genotipo (conjunto de alelos) AG tienen una mayor predisposición de padecer la enfermedad en sus dos formas clínicas.

Para el segundo SNP (rs3024505), la presencia del alelo T se asocia a una mayor predisposición de padecer EII y, particularmente, en pacientes diagnosticados con Colitis Ulcerativa, se detectó que está asociado a que la enfermedad se presente en edades tempranas y que reciban tratamiento basado en esteroides.

Lo anterior permite que el médico esté al tanto del progreso de su paciente y que tome las medidas necesarias y el tratamiento adecuado para ello. En este punto es fundamental resaltar la importancia de estos estudios: evitar, en el caso de pacientes diagnosticados con EII en un nivel leve a moderado, el tratamiento biológico o la cirugía. En otras palabras, se busca mantener al paciente con el tratamiento menos agresivo evitando la evolución de la enfermedad.

imag2

El proyecto a futuro

Pese a que no se han encontrado asociaciones con los otros dos genes (situación que el doctor explica con base en la diversidad genética de las poblaciones, que nos distingue como individuos incluso dentro de un mismo grupo humano), se ha realizado la identificación de frecuencia genotípica y alélica de 400 individuos no relacionados con la EII y la asociación de genes a 93 pacientes diagnosticados con la enfermedad, 78 de los cuales presentan CU y 15 EC.

Uno de los objetivos que se tienen a futuro es aumentar el número de muestras analizadas, y por tanto de pacientes, a fin de conocer un número mayor de asociaciones sobre la enfermedad y beneficiar a un mayor número de enfermos.

Los estudios que el doctor Fonseca lleva a cabo son una importante contribución a la Salud Pública del país, ya que, como el investigador mencionó, son dos padecimientos que han ido en aumento en los últimos años. La investigación contribuye a un sector de la sociedad mejorando la calidad de vida de los pacientes.

Víctor M. Reyes Flores

También podría gustarte